Agricultura

Soluciones BASF para Cerezos en Chile

Cultivo de cerezas en Chile: una dulce historia de éxito

¿Sabías que las cerezas ayudan a dormir mejor?  Esto se debe a que es una fuente de triptófano, aminoácido que compone la melatonina, hormona que ayuda a regular el sueño. Originaria de Asia, es una fruta que tiene una serie de beneficios y nutrientes como fibra y vitaminas, lo que puede explicar su popularidad en todo el mundo, especialmente aquí en Chile.

En este artículo, te contaremos sobre la importancia económica de las cerezas para nuestro país, además de cómo se cultivan y cuáles son los insumos esenciales. ¡Entérate!

Importancia económica

Chile es el tercer productor mundial de cerezas. Con 61.559,15 hectáreas plantadas, el país es el mayor exportador de cerezas del mundo, representando el 97% de las exportaciones del hemisferio sur.

En la temporada 2022-2023, se exportaron 415.315 toneladas de la fruta, convirtiendo a América Latina en la principal región exportadora de cerezas. El mayor importador de la fruta es China, a donde va a parar el 89% del total de fruta fresca y procesada que sale de nuestro país.

A principios de este año se exportaron alrededor de 1,734 millones de toneladas, por un total de 4.354 millones de dólares FOB. En comparación con el mismo periodo del año anterior, se registró un aumento del 5,6% en los beneficios, aunque la cantidad exportada fue inferior. 

Entre las regiones productoras se destacan dos: Maule y O'Higgins. Ambas se ubican en el centro del país y, al igual que el resto del país, están bañadas por el Océano Pacífico.

Las variedades más exportadas en el período fueron Lapins (149.000 toneladas), Santina (111.000 toneladas) y Regina (64.000 toneladas).

La logística es un reto importante, ya que los barcos son el medio de transporte más utilizado para este fin, con un 93% de todo el tráfico. Esta temporada ha habido más barcos Cherry Express, una iniciativa logística destinada a agilizar la exportación de cerezas a China.

Este tipo de envío permite completar el trayecto entre ambos países en 22 días, mientras que el mismo viaje en buques ordinarios dura entre 30 y 40 días. Al tratarse de una fruta muy delicada, requiere un tratamiento especial durante su recolección, selección, envasado y almacenamiento para que llegue intacta a su destino final.

¿Cómo se cultivan las cerezas?

Para seguir siendo el primer productor mundial de cerezas, es necesario emplear una serie de técnicas para lograr la máxima eficacia. Con una ubicación privilegiada que abarca una amplia gama de latitudes, topografía diversa con montañas, valles y llanuras, abundantes recursos hídricos con la presencia de la Cordillera de los Andes y la proximidad del Océano Pacífico, un clima mediterráneo con inviernos suaves y húmedos y veranos calurosos y secos, y una baja incidencia de enfermedades y plagas debido a su aislamiento geográfico, Chile tiene las condiciones ideales para el cultivo de cerezas.

 

Clima ideal

El clima mediterráneo es el más adecuado para el cultivo de cerezas en Chile. Prueba de ello es la ubicación de las dos regiones más prometedoras para esta actividad, O'Higgins y Maule, que, al estar en el centro del país, se encuentran bajo el paraguas del clima mediterráneo.

En cuanto a la temperatura, ésta puede variar dependiendo de la estación. En invierno, por ejemplo, lo ideal es mantenerse entre 7°C y 14°C. En verano, esta media aumenta, y las mejores condiciones se sitúan entre los 18°C y los 28°C.

 

Época del año

En general, hay disponibilidad de la fruta en cuestión durante los meses de octubre a febrero, cuando tiene lugar la cosecha y en consecuencia, cuando se vende la fruta. Sin embargo, se considera que la segunda quincena de diciembre y hasta la primera semana de enero es el periodo en el que hay mayor volumen de disponibilidad de la cosecha.

 

Formas de cultivo

Una técnica muy utilizada en el cultivo de cerezas en Chile es la llamada "cobertura solar". Consiste en instalar pantallas de sombra entre los árboles que producen la fruta, con el fin de cubrir la mayor superficie posible.

El objetivo de esto es proteger la futura producción de la intensa radiación que puede provenir del sol, además de evitar accidentes con otro tipo de objetos que puedan dañar las plantas.

 

Sistemas de cultivo

Existen diferentes sistemas de cultivo de cerezas que varían en función de las condiciones locales, los recursos disponibles y las preferencias de los agricultores, siendo los más comunes:

  • Cultivo convencional (al aire libre): los cerezos se plantan directamente en el suelo, en hileras o en bloques. El riego se realiza por goteo o aspersión. La poda se realiza para controlar el tamaño y la forma de los árboles, favorecer la aireación y facilitar la recolección.
  • Cultivo en invernadero: los invernaderos se utilizan para proteger a los cerezos de los fuertes vientos y la lluvia. Permiten un control más preciso del entorno, como la temperatura y la humedad. Esto puede adelantar la producción y mejorar la calidad de la fruta. Pero los costes de construcción y mantenimiento de los invernaderos son más elevados.
  • Sistema de túnel alto: es una variante de los invernaderos. Se trata de construir túneles altos que cubran las hileras de cerezos. Los túneles protegen de las condiciones climáticas adversas, pero permiten cierta ventilación natural. Son más económicos que los invernaderos tradicionales y sirven para prolongar el periodo vegetativo y proteger la fruta.
  • Cultivo vertical (en espaldera): consiste en orientar los árboles en un enrejado vertical o estructura de espaldera. Ahorra espacio y facilita la recolección y la poda. También permite controlar mejor la exposición al sol y la ventilación, lo que repercute positivamente en la calidad de la fruta.

Insumos indispensables para el cultivo de cerezo

Las enfermedades y plagas, como el Cáncer bacteriano, la Botrytis y la Monilia, son otro factor que hay que tener en cuenta a la hora de pensar en el cuidado de los cultivos de cerezos. Cuando se presentan este tipo de problemas, es necesario utilizar ciertos insumos, y de eso vamos a hablar ahora.

 

Herbicidas para el cultivo de cerezo

Los herbicidas se encargan de combatir las malezas. Las malezas son plantas no deseadas que se instalan en los cultivos y compiten por los nutrientes con las plantas del cultivo, impidiendo su desarrollo.

Teniendo esto en cuenta, BASF ha desarrollado Herbadox® 45, un herbicida especializado en combatir una serie de malezas, como el Calabacillo (Silene gallica) y el Pasto Pinito (Spergula arvensis).

 

Fungicidas para el cultivo de cerezo

Cuando las enfermedades que afectan al cultivo son de origen fúngico, los fungicidas son los agentes químicos más adecuados. Los problemas con los hongos suelen producirse en zonas de la plantación con poca luz solar y que acumulan mucha humedad.

Cantus® de BASF es el fungicida adecuado para combatir distintos tipos de hongos que pueden atacar al cultivo de cerezo, como la Botrytis (Botrytis cinerea).

 

Insecticidas para el cultivo de cerezo

Además de las malezas y los hongos, existe otro problema: los insectos plaga, que son quizá las plagas con daños más visibles. Para combatirlos, es necesario utilizar insecticidas, que tienen el poder de resolver este problema.

Por esto, Mospilan® de BASF es un insecticida que neutraliza los problemas de insectos plaga, como Frankliniella occidentalis o también conocido como trips californiano.

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Preguntas frecuentes sobre el cultivo de cerezo

¿Cuánto produce una hectárea de cerezos?

El rendimiento medio de cerezas por hectárea es de unos 10.672 kilos. Sin embargo, este rendimiento puede variar considerablemente en función de diversos factores, como la variedad de cerezo, la gestión del cultivo y las condiciones climáticas de la región de cultivo.

Mediante la aplicación de prácticas agrícolas como la poda, el riego, la fertilización y el control de plagas y enfermedades, es posible aumentar la productividad y obtener mejores resultados al final de cada cosecha.

Según el informe de ODEPA, Estimación de la producción y rendimiento de cerezas 2023-2025, se espera que la producción media de cerezas por hectárea aumente hasta los 12.000 kilos en 2025.

 

¿Cuántos años tarda un cerezo en producir cerezas?

En general, un cerezo joven puede tardar entre 3 y 5 años en empezar a producir frutos. Sin embargo, algunas variedades pueden tardar un poco más, entre 6 y 8 años, en producir una cosecha importante de cerezas maduras.

 

¿Con qué frecuencia debo regar un cerezo?

La frecuencia de riego de un cerezo puede variar en función de varios factores, como el clima, la estación, el tipo de suelo y la edad del árbol. La frecuencia de riego debe ajustarse a las condiciones climáticas.

En periodos de calor intenso o sequía, puede ser necesario regar con más frecuencia. En cambio, en las estaciones más frías o durante el invierno, el riego puede ser menos necesario. En nuestro sitio podrá encontrar información importante sobre tecnologías de conservación del agua y el suelo.

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